Un proyecto de cine

Ambición

Con más de 22 millones de espectadores al año y cerca de 500 salas, Cinesa es una de las protagonistas de la historia reciente de la exhibición cinematográfica en España.

Para adaptarse a las nuevas tendencias, en 2017 la empresa se propuso renovar las salas de cine que tenía en nuestro país. Bajo el concepto de Cinesa Luxe, se proponía poner el cine de lujo al alcance de todos a través de una apuesta por la innovación y el confort del espectador. Todo ello enmarcado en la celebración de su sexagésimo aniversario en España, que iba a tener lugar durante el 2018. 

Cómo trabajamos juntos

La envergadura del proyecto hizo imprescindible que Cinesa contara con los servicios de un equipo multidisciplinar que apoyara a su Construction Manager, gestionando los aspectos diarios de las obras, desde la fase de diseño a la de ejecución y entrega. Al fin y al cabo, se trataba de un proyecto a nivel nacional, que abarcaba a más de 500 salas y que iba a dar comienzo en dos espacios icónicos, los cines de los centros comerciales Xanadú y Equinoccio en Madrid.

Nuestro departamento de P&DS asumió, por tanto, la función de punto único de contacto entre el cliente y las empresas contratistas, asegurándose de que ambas partes tuvieran claro el objetivo y los plazos acordados. 

De la mano del cliente, nos involucramos en el proyecto desde la fase de diseño, estudiando las particularidades del negocio del cine. En este caso, además de disponer de un equipo de ingenieros, arquitectos y arquitectos técnicos, contamos con un experto en diseño y operaciones del negocio del cine, que nos ayudó a encontrar las soluciones adecuadas en cuanto la ejecución del proyecto. 

En el caso de Xanadú, por ejemplo, se optó por inaugurar el primer cine con butacas reclinables, lo que incrementaba el nivel de confort del espectador. Además, se instaló un sistema de sonido Dolby Atmos, considerado el más envolvente del mundo y a través del que el espectador podía experimentar lo que era de verdad estar en una película.

La fase de la obra también se presentaba retadora al tener que cumplir con un plazo y un coste muy ajustados. En el caso de Xanadú, estaba previsto que el espacio abriera sus puertas unos días antes de las vacaciones de verano, lo que supuso reformar 14 salas (unos 5.000 m²) en 19 semanas. Todo un reto que, una vez superado, nos permitió proyectar una nueva imagen fresca, moderna y tecnológica de los cines. El cliente cumplió las fechas de inauguración previstas e indudablemente logró sorprender al espectador, ofreciéndole una verdadera experiencia de cine.

Resolución

Actualmente, continuamos apoyando a Cinesa en su ambición de mejorar la experiencia del cliente en sus espacios en España.