Nota de prensa

Récord de operaciones inmobiliarias corporativas en 2020

En España, las operaciones de ventas de activos corporativos alcanzaron en 2020 los 1.100 millones de euros

05 de mayo de 2021

A pesar de la caída de la actividad económica durante 2020, los volúmenes de ventas de activos inmobiliarios corporativos en la región EMEA superaron a los de 2019 al alcanzar los 27.000 millones de euros, según se desprende del último informe de JLL «Obtener capital de los inmuebles corporativos» (Raising Capital from Corporate Real Estate). La mayor necesidad, tanto de preservar el capital y obtener liquidez, como de brindar flexibilidad en las carteras, ha llevado a las empresas a plantearse las operaciones de venta y alquiler posterior al vendedor (sale and leaseback) como forma de apuntalar la recuperación pospandemia y las estrategias de crecimiento.

Los niveles sin precedentes de enajenaciones registrados el año pasado resultan especialmente reseñables en vista de la coyuntura de pandemia mundial. 2020 también fue el tercer año consecutivo en el que el valor total de las ventas de inmuebles corporativos superó los 20.000 millones de euros. Asimismo, tuvo lugar un aumento de la actividad en los sectores empresariales penalizados por la pandemia. Las oficinas, los locales comerciales y las naves industriales continuaron siendo los sectores más activos, ya que representaron el 80 % del valor total de las ventas de activos en la región EMEA. Las ventas de edificios de oficinas por parte de empresas crecieron con fuerza en 2020 y se efectuaron operaciones por valor de 9.700 millones de euros, lo que representa un incremento interanual del 10 %.

En España, la actividad registró un leve descenso en 2020: 1.100 millones de euros recaudados en 34 operaciones, frente a los 1.500, correspondiente a 37 operaciones del año anterior. Cabe destacar las operaciones de portfolios protagonizadas en el sector de la alimentación y supermercados. Entre las principales de este tipo cerradas en el mercado español en 2020 sobresalen el porfolio de Mercadona vendido a LCN Capital Partners, el de Miquel Alimentació vendido a AB Sagax, el de Eroski a W.P. Carey o el de Supermercados Lucena a un inversor privado.

«Las estrategias de monetización de activos están demostrando ser una parte fundamental de los cambios que están realizando los usuarios propietarios corporativos para preservar el capital y liberar liquidez, así como para reestructurar sus carteras a fin de apuntalar los planes de negocio pos-COVID-19», explica Nick Compton, Head of Corporate Capital Markets, EMEA en JLL. «La necesidad de liquidez, de flexibilidad operativa y de optimizar las carteras seguirá impulsando las operaciones de venta y alquiler posterior durante 2021. Además, cabe esperar que el creciente énfasis en un mayor desempeño en materia de criterios medioambientales, sociales y de buen gobierno (en inglés, ESG) y la mejora de la confianza sobre la economía en la región también fomentarán la materialización de más operaciones».

El Reino Unido, Alemania y Francia representaron el 52 % del volumen total de operaciones en la región EMEA. En Alemania, las ventas de inmuebles corporativos captaron la histórica cifra de 5.600 millones de euros en el marco de 122 operaciones, lo que constituye un aumento del 11,4 % en tasa interanual. La menor cantidad de grandes operaciones con carteras se tradujo en unos volúmenes inferiores en el Reino Unido, donde el valor de las enajenaciones corporativas cayó un 45 % en términos interanuales, hasta los 4.400 millones de euros. Los Países Bajos e Italia fueron objeto de una actividad considerable, con una captación de 1.800 millones de euros y 1.400 millones de euros, respectivamente.

Matthew Richards, Capital Markets CEO, EMEA en JLL, declaró: «Los niveles récord de operaciones de venta y alquiler posterior registrados en 2020 demuestran el creciente interés de los inversores por asociarse con empresas para monetizar un amplio abanico de activos inmobiliarios. Cada vez más empresas colaboran también con los inversores para que estos financien la construcción de nuevas sedes y otras instalaciones que puedan ofrecer los entornos adaptables y sumamente sostenibles que serán fundamentales cuando dejemos atrás la pandemia.»

Mark Caskey, Corporate Solutions CEO, EMEA en JLL, añadió: «Más allá de recurrir a las operaciones de sale and leaseback para captar capital e incrementar la liquidez, observamos cómo muchas empresas se están replanteando por completo su enfoque hacia los activos inmobiliarios y el vínculo de estos con la flexibilidad operativa conforme superamos la pandemia. Las ventas de activos corporativos ofrecen a las empresas una forma viable y atractiva de generar valor mediante sus carteras inmobiliarias y de acelerar el crecimiento, y prevemos que este tipo de actividad continuará durante 2021».