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La logística de la cadena de frío: nuevos tiempos, mayor eficiencia

La cadena de frío se adapta a las demandas de los consumidores actuales y a los nuevos retos de la sostenibilidad.

13 de julio de 2021

La necesidad de entregar productos frescos y congelados en un mínimo de tiempo y en las mejores condiciones está creciendo a pasos agigantados y, con ello, se intensifica la carrera por conseguir instalaciones de almacenamiento en frío más grandes, más inteligentes y más ecológicas.

Hoy en día, las naves de entrega y envío no sólo se están replanteando su diseño y ubicación, sino que también recurren a la tecnología más avanzada para aportar eficiencia a sus procesos y reducir su huella de carbono.

"En toda la cadena de suministro de alimentos refrigerados y congelados, los centros de distribución se juegan muchos aspectos, desde el deterioro de los productos perecederos, hasta los envíos perdidos y el derroche de energía", afirma Ed Cole, responsable de logística de JLL en el Reino Unido. "La nueva necesidad de rapidez en el mercado, consecuencia de las mayores expectativas de los consumidores, ha influido en las decisiones en todos estos ámbitos".

A continuación, analizamos cinco formas en que la logística de la cadena del frío se está adaptando a los cambios y a la nueva normalidad.

1. Escala y tamaño

A medida que los supermercados y las empresas de alimentación online siguen creciendo, su atención se centra cada vez más en la escalabilidad. Esto lleva a los almacenes frigoríficos a hacerse más grandes, ya sea a través de planes de expansión o mediante la construcción de nuevas instalaciones. Por ejemplo, la cadena alemana Lidl está construyendo su mayor centro de distribución en el Reino Unido para satisfacer la demanda de los retailers minoristas en Londres y sus alrededores a partir de 2023.

En paralelo, el aumento de la demanda de productos congelados de conveniencia está impulsando la mayor presencia de áreas de congelación dentro de las instalaciones existentes, dice Cole.

2. Incremento de la flexibilidad

Dado que cada vez más productos, como los suministros médicos y las vacunas, tienen sus propios requisitos de temperatura, la flexibilidad es fundamental. Hay una mayor necesidad de múltiples cámaras frigoríficas y de control de la humedad dentro del espacio refrigerado.

"Tener la flexibilidad de pasar de congelados a refrigerados dentro del mismo espacio es cada vez más importante para hacer frente a los cambiantes hábitos de los consumidores y las consiguientes necesidades de almacenamiento”, afirma Alan Selby, director de ventas de refrigeración industrial de Integral UK de JLL. “Los volúmenes de alimentos son cada vez mayores y eso ha hecho que se preste más atención a las configuraciones de espacio menos rígidas”.

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3. Entrega de la mercancía

Paralelamente a los tiempos de entrega más rápidos y el aumento de los volúmenes de mercancías, que han dado lugar a nuevas estrategias de última milla, las decisiones sobre dónde ubicar las naves frigoríficas buscan equilibrar la necesidad de tamaño con la proximidad a los consumidores finales.

"Encontrar esas grandes parcelas en las zonas urbanas y suburbanas es un reto: los alquileres y el valor del suelo pueden ser prohibitivos ", dice Cole. "Algunas grandes cadenas de supermercados con servicios online han decidido, en cambio, utilizar partes de sus tiendas para la recogida. Aun así, siempre debe primar el equilibrio".

De hecho, el picking en la tienda -una estrategia popular entre las cadenas de supermercados Asda y Sainsbury's- es más costoso, según el análisis de Bain & Co.

"La clave está en conseguir el equilibrio adecuado entre los centros de microcomercialización y aquellos de distribución centralizados", afirma Cole. "La logística de la cadena de frío se encuentra en el epicentro de esta transformación".

4. Aceleración mediante la tecnología

La tecnología está impulsando tanto la flexibilidad como la eficiencia de la cadena de distribución de productos en frío. En Estados Unidos, la nueva instalación de MTC Logistics en la terminal de contenedores de la Autoridad Portuaria del Estado de Alabama cuenta con una avanzada automatización y tecnología. Mientras, en Dublín, la empresa Jungheinrich, con sede en Hamburgo, ha introducido transelevadores para su uso en temperaturas extremas como parte de un nuevo almacén frigorífico, que funcionará a menos 35 grados.

Al mismo tiempo, la robótica de empresas como MMCI, capaz de funcionar en condiciones de frío, y las estanterías móviles -como las que se han instalado en las nuevas instalaciones de Reed Boardall en Harrogate, que permiten llevar cuenta de las existencias a mayor velocidad- son cada vez más comunes, afirma Selby.

"Las estanterías móviles permiten planificar el día con antelación y eliminan los métodos de picking tradicionales, más lentos", afirma. "La implementación depende del coste, pero ahora mismo el énfasis está en la eficiencia y la velocidad".

El aprendizaje automático y la Inteligencia Artificial (IA) también facilitan que cada vez más haya seguimiento en tiempo real y un control de calidad proactivo.

5. Ahorro de energía

Las instalaciones de almacenamiento en frío requieren de una importante cantidad de energía, que fluya constantemente. Esto representa un desafío en un momento en que la sostenibilidad es una prioridad creciente. Por ello, cada vez más naves de frío buscan reducir su uso de energía y recurrir a fuentes más sostenibles.

"El uso de la energía es el mayor gasto de este tipo de naves: la refrigeración requiere de un importante número de recursos y el almacenamiento de productos congelados por sí solo consume mucha energía", dice Selby. "Con las nuevas herramientas disponibles, existe la oportunidad de capturar la energía desperdiciada y darle otro uso, como el de calentar el agua para limpiar grandes superficies".

Lo cierto es que constantemente se están explotando nuevas vías para ahorrar energía y costes, desde sistemas de gestión de la energía hasta paneles solares en los tejados y sistemas de recuperación de agua. Así, por ejemplo, las naves de almacenamiento a temperatura controlada de Magnavale en el Reino Unido funcionarán con 100% energía renovable.

"Todavía observamos cierta reticencia en cuanto a los periodos de amortización, pero la actitud está cambiando. En los próximos años, la concienciación sobre el coste y el suministro de energía será tan importante como el coste de los equipos del almacenamiento en frío ", concluye Selby.

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