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El futuro del sector hotelero español es de color verde

En nuestro país, los hoteles hacen gala de sus credenciales ecológicas a medida que toman cada vez más medidas para reducir su huella medioambiental y atraer a una nueva generación de consumidores con conciencia ecológica.

07 de marzo de 2019

Los Paradores españoles  han sido los últimos en prepararse para un futuro más ecológico: estos establecimientos están realizando la transición hacia fuentes de energía renovable mediante la incorporación de soluciones como la biomasa o los paneles solares.

«El compromiso de los Paradores de suplir sus necesidades energéticas exclusivamente con energía renovable constituye un importante hito para el sector hotelero español», afirma Carlos Ortega, Vicepresidente Senior de la división de Hoteles & Hospitality de JLL. «Al tratarse de compañías del sector público, uno de los objetivos consiste en dar ejemplo».

Este tipo de iniciativas están en consonancia con los objetivos ecológicos de España, enfocados en suministrar electricidad a través de fuentes renovables para 2050 como parte de sus esfuerzos por convertirse en una economía con menores emisiones de carbono. Sin duda, el sector hotelero nacional deberá desempeñar un papel esencial a la hora de cumplir estos propósitos.

“Los hoteleros no pueden hacer caso omiso del creciente interés por los viajes sostenibles.”

Carlos Ortega -, Vicepresidente Senior, JLL Hoteles & Hospitality

Acentuar el perfil sostenible de los hoteles

Últimamente, las principales marcas hoteleras en España han implantado un amplio abanico de iniciativas ecológicas para reducir su huella medioambiental. La cadena española Meliá se fijó como objetivo eliminar los productos de plástico de un solo uso en sus establecimientos —desde botellas y vasos hasta bolsas— en 2018 y sustituirlos por productos fabricados a base de materiales reutilizables. La cadena prevé que esta medida evitará la emisión de más de 15 toneladas de dióxido de carbono cada año derivadas de la eliminación de residuos.

Otra firma hotelera de alta gama, Iberostar, también está dando pasos para eliminar los plásticos un solo uso, fomentar la pesca sostenible y mejorar la protección de los océanos, que constituyen uno de los principales atractivos para los más de 80 millones de turistas que viajan a España cada año. Además, la española NH Hotel Group ha reciclado varios miles de kilos de corchos de vino para convertirlos en materiales que pueden emplearse en los suelos y las paredes de sus hoteles.

Entremedias, los hoteles boutique también están adoptando nuevas tecnologías para mejorar su faceta sostenible. Hoteles como el de La Isla y el Mar de Lanzarote y el Pulitzer de Barcelona fueron galardonados con la certificación Biosphere por su gestión sostenible. En la Ciudad Condal, la firma OD Hotels, una pequeña cadena española de las Islas Baleares, revistió recientemente su fachada externa con vegetación e incorporó paneles solares, además de instalar un sistema de calefacción y aire acondicionado de última generación que reduce el consumo energético en más de un tercio.

Sin embargo, para algunos grupos hoteleros, el énfasis actual en la sostenibilidad es consecuencia de la estrategia de negocio que están desarrollado a largo plazo. Cadenas como Fuerte Hoteles llevan más de 50 años abogando por el turismo responsable, formando a sus empleados en buenas prácticas de sostenibilidad, utilizando energías renovables y adoptando medidas para reducir el consumo de agua.

«Todos estos avances también se reflejan en la creciente importancia de los departamentos de RSC en los grupos hoteleros», afirma Ortega. «Por ejemplo, Fuerte Hoteles, junto con otras muchas grandes marcas internacionales, publica un informe anual de RSC donde reflejan el grado de cumplimiento de sus objetivos de sostenibilidad. Este nivel de transparencia fomenta que los hoteles sigan mejorando su propio desempeño y garantiza que otras cadenas sigan su ejemplo, en un momento en el que los consumidores tienen cada vez mayor conciencia medioambiental».

Minimizar la huella de carbono

Cada vez más personas en todo el mundo muestran interés por el concepto de «viaje sostenible», que incluye optar por hoteles respetuosos con el medio ambiente. Un análisis del portal de reservas hoteleras Booking.com reveló que más de dos tercios de los viajeros querían hospedarse en hoteles respetuosos con el medio ambiente en 2018, un incremento considerable en comparación con los datos de 2017 y 2016.

«Los hoteleros no pueden hacer caso omiso del creciente interés por los viajes sostenibles», explicó Ortega. «Hoy día, los consumidores se muestran más preocupados que nunca por los valores sociales y medioambientales de las marcas, y estos factores se están convirtiendo en una parte fundamental del proceso de toma de decisiones a la hora de reservar un alojamiento. Por tanto, los hoteles deben evolucionar a la par que sus huéspedes para mantener su competitividad. España es líder mundial en turismo, y no cabe duda de que no puede permitirse quedarse rezagada en esta área.

El quid de la cuestión no reside solo en los sistemas subyacentes que permiten a un hotel operar de manera más eficiente. Otros rasgos, como garantizar que los alimentos del hotel proceden de fuentes sostenibles, proporcionar bicicletas a los clientes o instalar puntos de carga para coches eléctricos, como hace el hotel NH Collection Barcelona Constanza, también pueden tener repercusiones claras en la imagen de un hotel», señaló Ortega.

De cara al futuro

Si bien muchos hoteles están evolucionando en la dirección adecuada, es necesario realizar muchos más esfuerzos para que el sector hotelero español sea realmente sostenible. «Los hoteles gestionados por el Estado, como los Paradores, nos muestran el tipo de medidas que pueden adoptarse», afirmó Ortega. «Resulta necesario contar con más apoyo y con más incentivos financieros por parte de las autoridades para fomentar que más hoteles adopten energías renovables y otras medidas ecológicas.

Se trata de un proceso que debe inscribirse en el amplio movimiento en pro de la sostenibilidad que existe en España y que aboga por reducir las emisiones de carbono y construir un futuro más ecológico en todos los sectores, no solo en el hotelero».

Con todo, Ortega considera que el sector hotelero puede constituir un catalizador real del cambio mostrando el abanico de acciones que pueden emprenderse. «Los hoteles reciben visitas de un gran número de viajeros que se desplazan por motivos corporativos o de ocio, por lo que pueden dar ejemplo mediante la instalación de electrodomésticos energéticamente eficientes en las habitaciones o la oferta de alternativas a los plásticos de un solo uso, entre otras medidas. Una vez que los huéspedes los prueban en un hotel, resulta más sencillo que compren productos similares para utilizarlos en sus hogares».

Para el elevado número de hoteles que hay en España, mejorar sus credenciales ecológicas va más allá de utilizar el concepto de sostenibilidad como reclamo comercial en sus páginas web o en placas situadas en las recepciones. Se trata de un pilar fundamental sobre el que basar el futuro de un sector de mucho peso para el éxito económico del país a largo plazo.